Hubo una época en la que Valencia dominó Miss España. En sus orígenes el concurso de Miss España se llamaba Señorita España y en sus dos primeras ediciones fue la belleza valenciana representada en dos de nuestras paisanas, la que se alzó con la victoria. En este artículo conoceremos la historia de Pepita Samper Bono, la primera Miss España de la historia.
En enero de 1929, los diarios franceses Le Journal y L’Intransigeant anunciaban la organización de un concurso que llevaba el título de “En busca de la mujer más bella de Europa”, entre 20 países europeos.
Para ello, los diarios franceses buscaron la colaboración de otros periódicos europeos, en el caso de España el elegido fue el diario ABC, a los que solicitaban que organizaran concursos en sus respectivos países para elegir a las mujeres más bellas de cada uno.
Las ganadoras viajarían a París donde se elegiría a la más bella de Europa, la cual sería enviada posteriormente a Chicago para «oponer su belleza» frente a la mujer más bella de Estados Unidos, que fue elegida por el diario The Chicago Tribune.
El 2 de enero de 1929, el diario ABC anunciaba el concurso para elegir a la mujer más bella de España.
En el concurso de ABC podía participar cualquier mujer de España, que estuviese soltera y tuviera entre 16 y 25 años y se podía inscribir de dos formas, presencialmente en Madrid o mediante correo.
La elección de la “Señorita Valencia”
El ABC, al igual que habían hecho los diarios franceses, solicitó a otros diarios regionales su ayuda para encontrar a las mujeres más bellas, en la Comunidad Valenciana fue el Levante, el mercantil valenciano el encargado de hacerlo.
Según el diario El Pueblo de Valencia y El Liberal madrileño, el concurso no tuvo mucha repercusión en Valencia, aunque según el diario ABC se presentaron 100 mujeres.
La elegida para representar a la Comunidad Valenciana fue la que ocupó la 84 posición, Pepita Samper Bono.
Sin embargo Pepita no fue la que se presentó, fue su hermano Enrique, el que tras enterarse del concurso envió una foto de su hermana a El Levante. Pepita se enteró en el momento en el que los periodistas fueron a su casa a preguntarle por la elección, el diario El Pueblo recoge las siguientes palabras de Pepita:
“¿De qué hablan ustedes? ¿Yo reina de la belleza valenciana? ¡Pues si no sé nada de esto! ¡Si yo no me he presentado a ningún concurso!”
Tras enterarse de que había sido su hermano el que había enviado su foto dijo “Este hermano mío es el demonio. Estoy nerviosisima. No sé lo que me pasa. Si me preguntasen, no sabría responder si estoy contenta o entristecida. Pero si no me lo explico, Señor. ¡Con tantas muchachas bonitas que hay en Valencia! ¿Cómo han podido acordarse de mí? ¿Por qué no rectifican el acuerdo y designan a otra?”
Pepita tenía 21 años, tenía pareja en aquel momento, vivía en la calle Doctor Simarro y le encantaba la música, las flores y el cine y en el diario El Pueblo la describían así: «Es alta, opulenta, de cabellos trigueños, boca pequeñísima, grandes ojos azules y rostro risueño y apacible».
Había estudiado en el conservatorio de Valencia donde había aprendido a tocar el Piano y estaba cursando la carrera de Comercio, reconociendo que le gustaban mucho las matemáticas.
El 25 de enero, Pepita y su madre salieron en dirección a Madrid para participar en el concurso nacional.
El concurso de ABC
Regresando al concurso de ABC, se inscribieron 28 mujeres de las cuales dos no participaron finalmente en el concurso que se celebró el 25 de enero de 1929 en la Casa de Blanco y Negro en Madrid.
Las mujeres que se presentaron al concurso fueron:
- Lolita Muñoz, de 16 años y de Madrid.
- Amparo Perucho, de 16 años y de Madrid.
- No aparece en el diario ABC, por lo que fue una de las que no participaron.
- No mencionan su nombre porque no quiso que se supiera que se había presentado, era rubia y de Madrid.
- María del Carmen Gómez, de 18 años y de Madrid.
- Leonor Cuesta y Amorós, de 18 años y de Madrid.
- Carmen de Toledo, de 19 años, actriz de cine y de Madrid.
- Amelia Sánchez de 18 años, actriz de cine y de Madrid.
- Conchita Peñamaría y Dreixa de Vigo.
- Monna Lisa. Este era su nombre artístico ya que era actriz de teatro y de Madrid.
- Julita Galván. Este no era su nombre real, lo dió para que no se supiera su nombre verdadero en caso de no ganar, era de Madrid y tenía 20 años.
- Julita Fernández Camargo de 16 años y de Madrid.
- Gloria de Castro y Moreno de Madrid y hermana de la siguiente.
- Margarita de Castro y Moreno de Madrid y hermana de la anterior.
- María del Pilar Alonso Colmenares de 18 años y de Logroño.
- Eugenia Meliá y Tovar, de 18 años y madrileña, no participó en el concurso porque recibió la carta tarde.
- Amelia Prini y Perona de 16 años y de Málaga.
- Conchita de la Huerga y Herrera de 20 años y de Madrid.
- Rosario Coronil y Damas de 16 años y de Sevilla. Según Mundo Gráfico se llamaba Rosario Caroni Ayala.
- Carmen Rivas Benítez de 17 años y de Sevilla.
- María Gil Sainz de Santander.
- Esperanza del Caño de Villavicencio de los Caballeros en Castilla y León.
- De Murcia aunque no quiso decir ni su nombre ni su edad, aunque si se dijo que pertenecía a la aristocracia local.
- Olga Peláez, de 17 años y nacida en Rusia de padres asturianos.
- Elodia Domenech Zaragoza de 18 años y de Barcelona.
- Pepita Samper Bono de 21 años y de Valencia.
- Mercedes Huelves de Madrid.
- Vicenta Nuez Durán de Zaragoza.
El 26 de enero los diarios ABC y El Liberal nombraron a una Laura Nadal, probablemente fue la concursante número 4 o la 11.
Para decidir quién resultaba ganadora se estableció un jurado de tres hombres que debería elegir. El jurado lo formaron el periodista madrileño José Juan Cadenas, el pintor valenciano Manuel Benedito y Vives y el escultor, también valenciano, Mariano Benlliure Gil.
Con dos valencianos en el jurado resulta factible presuponer que quizá la elección de Pepita, la única valenciana que se presentó, no fuera causa de ser la más bella.
Pero esto sería una mera suposición, la realidad es que la “belleza” de Pepita fue altamente valorada, así la describieron en el diario ABC: «El informador realiza el acto heroico de permanecer ante Pepita cinco minutos, sin sufrir el más leve desvanecimiento, lo que le vale las entusiastas felicitaciones de la concurrencia; pero no puede evitar el titubeo propio de los pocos años ante tan soberana belleza, y un azoramiento que le hace subir el rostro todos los pavos de las acreditadas dehesas de Sigüenza»
Pese a que la descripción pueda parecer una exageración, leyendo la entrevista podría parecer que no lo fue, ya que el entrevistador parece incapaz de organizar dos palabras, siendo Pepita la que lleva la voz cantante, leyendo en varias ocasiones; «Querrá usted preguntarme» o «Usted quiere decir».
Del mismo modo, el diario El Liberal, consideraba que las representantes de Cantabria, Madrid y Valencia eran las candidatas a ganar.
El 25 de enero por la mañana se realizó un desfile en el que todas las participantes desfilaron frente al jurado dos veces y por la tarde se celebró una segunda reunión para elegir a la ganadora, 14 concursantes quedaban a las 4:30 de la tarde
Leonor Cuesta, Conchita de la Huerga, Carmen de Toledo, Amelia Sánchez. Amelia Prini Perona, Gloria y Margarita de Castro y Moreno, Pilar Alonso Colmenares, Laura Nadal, María Luisa Aparicio, Carmen Rivas, María Gil Sainz y Pepita Samper Bono.
Las concursantes desfilaron frente al jurado y regresaban a una sala donde se encontraban los periodistas que habían ido a cubrir el evento. Sobre las 5 Carmen de Toledo fue elegida la representante de Madrid y comenzó entonces una competición entre las representantes de las diferentes comunidades.
La decisión final se dió entre 5 concursantes, la señoritas Barcelona, Sevilla, Santander, Valencia, Castilla y León y Madrid, por lo que las finalistas fueron Elodia Domenech Zaragoza (CAT), Carmen Rivas Benítez (AND), María Gil Sainz (CANT), Pepita Samper Bono (VAL), Esperanza del Caño (CYL) y Carmen de Toledo (MAD).
Poco después de que el reloj marcase las 6 de la tarde, el jurado había elegido a la ganadora.
El fallo del jurado decía así: «El Jurado hace, ante todo, una manifestación: no se elige en este concurso la mujer mas bonita de España, puesto que en España hay muchas mujeres bonitas. A este concurso han concurrido cinco señoritas elegidas por la Prensa, representando otras tantas regiones españolas, y un plantel de madrileñas, todas lindas y atrayentes. (…) El Jurado, eligiendo entre las representaciones que han acudido a este concurso, designa para ostentar en París la representación de España a las «SEÑORITA VALENCIA». Su nombre es PEPITA SAMPER BONO. En Madrid, en la Casa de ABC, a 25 de enero de 1929.»
Tras leer el fallo la sala estalló en aplausos y vítores para Pepita que, emocionada y entre lágrimas, tuvo que afrontar una lluvia de fotografías y el abrazo y los besos del resto de concursantes.
Durante toda la tarde y según la prensa de la época, se sucedieron las felicitaciones a Pepita, las ovaciones, los aplausos, los vivas a Valencia y España. Juan Ignacio Luca de Tena, representante de la Prensa Española, entregó como premio una pulsera de diamantes y zafiros a Pepita valorada en 5000 pesetas.
Pepita pidió hablar por teléfono con su padre en Valencia y expresó su deseo de llevar a París un vestido tradicional de Valencia concretamente uno que fuera blanco con rosas encarnadas.
Valencia estuvo más que presente en la capital, en la Zarzuela se representó en honor a las concursantes la obra «Al dorarse las espigas» cuya música estaba compuesta por el valenciano Francisco Balaguer Mariel.
Ya a última hora de la tarde, Carlos Sousa Álvarez de Toledo, alcalde de Valencia y que se encontraba en la capital, se acercó al Hotel Gran Vía para felicitar a Pepita por su victoria. Los días siguientes fueron para Pepita muy ajetreados, las felicitaciones y obsequios por su victoria no paraban de llegar.
El 28 de enero por la tarde, Pepita salía en dirección a Valencia llegando a la capital del Turia el 29 por la mañana. Pepita fue recibida por una gran multitud, veinte mil personas según ABC la esperaban en la estación de tren a su llegada.
Llegaba Pepita llena de flores que había recibido en las estaciones de Xàtiva, Carcaixent y Silla y bajó del tren mientras sonaba el himno valenciano. Tardó media hora en poder salir de la estación y después, acompañada de su familia, fue a ver a la Virgen de los Desamparados.
Los homenajes continuaron en Valencia, El Levante, Lo Rat Penat o el conservatorio de Valencia quisieron felicitar especialmente a la valenciana. A las 12 de la mañana salió al balcón del ayuntamiento donde fue ovacionada por la gente mientras sonaba Valencia.
Este fue el ambiente en el que vivió Pepita tras su elección, un agasajamiento constante por parte del pueblo y de todas las instituciones valencianas.
París
El 31 de enero a las 2 de la tarde, salía Pepita hacia Madrid en un automóvil acompañada por sus padres, su novio, el dibujante Ernesto Guasp, un futbolista identificado como Molina como mecánico y el chofer.
Llegaron a Madrid sobre las 10:15 de la noche donde permanecieron unos días hasta que salieron hacia San Sebastián donde comenzó su viaje a la capital francesa.
El 4 de febrero a las 10:40 partió en tren hacia Francia acompañada de un redactor del Levante y de su madre. Los periódicos de la época dejan constancia del aspecto de cansancio que tenía Pepita en ese momento.
Algo lógico teniendo en cuenta que desde su elección no había parado de acudir a actos de homenaje, de recibir la atención de todo el mundo, un no parar continuado que cansaría a cualquier persona.
El 4 a las 6 de la tarde llegó Pepita a París, la primera contrincante con la que se encontró fue la representante griega Aspasia Karatja, lo hizo en el hotel.
Una vez en Francia la rutina de Pepita cambió muy poco, tuvo que acudir a una inmensa cantidad de fiestas, homenajes y eventos de todo tipo.
En Francia la belleza de Pepita continuó enamorando a todo el que la conocía, según el diario ABC, las favoritas de la gente eran las representantes de España, Polonia y Francia.
A las 7 de la tarde del 6 de febrero, Pepita participó en su primera aparición frente al público francés, lo hizo en el baile de «Les petits lits blancs» y apareció vistiendo su traje tradicional valenciano.
El concurso europeo se llevó a cabo el jueves 7 de febrero de 1929, a las 3 de la tarde el jurado, formado por un representante de cada nación se reunió y comenzó la elección de la ganadora que se alargó hasta las 6:30.
Las 16 participantes del concurso fueron:
- Maricosa Ganesco de Rumanía, 24 años.
- Annie Haunel de Suiza, 16 años.
- Elisabeth Simon de Hungría, 16 años.
- Elisabeth Raryn de Alemania.
- Clara Russell de Irlanda.
- Irene Levistky de Rusia.
- Aspasia Karatja de Grecia, 23 años.
- Bennie Diks de Inglaterra, 20 años.
- Lisa Goldarbeiter de Austria, 19 años.
- Luba Yotrowa de Bulgaria.
- Derna Giovanini de Italia, 16 años.
- Vikebe Mogemsem de Dinamarca.
- Viadislawa Kostak de Polonia.
- Stanislava Makjevich de Yugoslavia.
- Johane Koopenan de Países Bajos, 21 años.
- Pepita Samper de España, 21 años.
La mayoría de las representantes eran rubias.
Las concursantes pasaron en dos ocasiones frente al jurado, una primera ocasión reunidas todas juntas y una segunda ocasión en solitario. Las representantes desfilaron frente al jurado por orden alfabético según su país. Pepita desfiló con un vestido azul y según parece fue, junto a las representantes de Polonia, Italia, Grecia, Francia y Hungría, una de las que más llamó la atención del jurado.
Los jurados debían repartir puntos en base a, como os podréis imaginar, cuestiones relacionadas con el cuerpo y los rasgos de las concursantes, sin embargo parece que lo que más valoró el jurado fue la juventud de las concursantes.
A las 6:30 el jurado y las participantes aparecieron en el gran salón del diario Le Journal siendo aclamadas por los allí presentes, siendo España, Polonia y Rusia, las que más aplausos recibieron.
Sin embargo, hubo que esperar hasta las 10 de la noche para conocer a la ganadora. La ganadora fue finalmente Isabel Simón, la representante de Hungría, algo que causó una gran sorpresa al no ser una de las favoritas del público para llevarse el concurso.
En Valencia la noticia de la derrota de Pepita supuso una gran decepción ante la expectación que se había generado, al fin y al cabo ella era una de las favoritas.
Pepita regresó a España donde tras unos días en Cataluña salió finalmente hacia Valencia, donde llegó a las 8 de la tarde del 13 de febrero de 1929. Fue recibida como ya estaba acostumbrada.
Los días posteriores al concurso de Miss Europa fueron idénticos a los que le precedieron y la aventura europea de Pepita terminó, no así su importancia para la historia de la Comunidad Valenciana, pues, como ya contaré en otro artículo, su belleza marcó un hito nuevo tan solo unos meses después.
La prensa siendo la prensa
En la actualidad, si buscas información de Pepita, te encontrarás con muchos artículos que hablan sobre este evento y en muchos de ellos encontrarás que hablan de que la muerte de la reina María Cristina de Habsburgo-Lorena el 6 de febrero hizo que Pepita, en señal de respeto, se retirase del concurso.
Esta afirmación, la cual yo mismo mencioné en el video corto que hice para nuestras redes sociales, es falsa. Pepita no se retiró del concurso, participó como el resto de pretendientas en el mismo.
Lo único que he encontrado que fue cancelado por la muerte de la reina fue una recepción que el Centro Español en París había organizado en honor de Pepita y que finalmente no se celebró y que no participó en unos festejos organizados en Niza, quedándose en París hasta el domingo, momento en el que regresó a España.
Pero bueno, supongo que como en otras ocasiones esto se trata de algo que alguien se inventa y que todos copian sin comprobar si fue verdad o no.
Otra belleza valenciana
Este artículo termina aquí, pero no la historia de las bellezas valencianas, porque al año siguiente la ganadora del concurso señorita España fue otra paisana nuestra, pero eso te lo contaré en otro artículo.